Por qué deberías escuchar audiolibros en el trabajo (y no música)

escuchar audiolibros en el trabajo


Leer es algo que a muchas personas les gustaría hacer más seguidamente. Hay muchísimos libros muy interesantes, de todas las clases, disponibles para su lectura. Pero no todas las personas tienen tiempo para disfrutar de ellos.

Afortunadamente, existen soluciones. Los audiolibros son una alternativa estupenda. Te permiten disfrutar del contenido del libro sin tener que poner tus ojos en el texto, pudiendo liberar tus manos y ojos, y “leer” a través de tus oídos. Una alternativa cada vez más popular.

Es algo increíblemente útil, especialmente porque puedes hacerlo en cualquier sitio. Incluso en tu trabajo. No importa donde te encuentres, allí podrás escuchar el contenido de prácticamente cualquier libro.

¿Existen algunas ventajas de escuchar estos libros narrados? Por lo general, en el trabajo se suele escuchar música. Pero hay algunos motivos por los que deberías dejar la música de lado y dar paso a los audiolibros.

Ayuda a mejorar la memoria

Cuando lees un libro (al igual que puede pasar al ver una serie), tienes que recordar muchos detalles. Te presentan los personajes, con sus nombres y características, así como los sitios en los que se desarrolla la historia y distintas escenas.

Todos los datos son fundamentales para poder hacerse una imagen mental de cómo es el sitio, sus personajes y cómo se lleva a cabo la historia del libro. Al retener esta información, con cada audiolibro se estimula más y más la memoria, haciendo que el cerebro aprenda y se acostumbre a retener información.

Mejora las habilidades de comprensión

Indudablemente, es necesario tener una buena comprensión lectora para poder entender exactamente de lo que trata un libro. ¿Alguna vez has tenido que releer algo para poder entenderlo? ¿Ha cambiado tu percepción del significado de una frase al volver a leerla?

Cuando se lee, no es necesario tener grandes habilidades de comprensión, ya que siempre puedes volver al párrafo anterior. Pero, con los audiolibros esto no es así. No puedes ir hacia atrás de una forma tan sencilla o cómoda.

A no ser que pauses el audio y lo retrocedas, deberás de mejorar tu comprensión. Tu cerebro intenta anticiparse al futuro, y trata de adivinar qué sucederá en el libro. Escuchar audiolibros agudiza la comprensión, a la par que también trabaja el pensamiento crítico.

Gestiona mejor tu tiempo

Mientras que para poder leer tienes que prestar atención al texto, usar tus ojos y manos, los audiolibros te liberan de toda la “carga” que suponen los libros. Puedes “leer” en cualquier lugar, especialmente cuando trabajas.

Sin embargo, puede ser un arma de doble filo. Para poder estar al tanto del audiolibro necesitarás cierta concentración y atención. Escuchar audiolibros en el trabajo es ideal para poder “ahorrar” tiempo, o tener un espacio para poder leer.

Esto es ideal siempre y cuando el trabajo sea mecánico, o repetitivo, y no requiera de una gran concentración. En caso contrario sólo se podrá prestar atención al libro o al trabajo, dejando de lado la otra opción.

Mejora la salud mental

Leer es bueno para ti, para todos. Y no es un decir. Hay estudios que confirman que los libros y los audiolibros pueden ser beneficios para la salud mental. Estos resultados se han podido ver en personas de todas las edades.

Escuchar audiolibros puede desestresar y reducir los niveles de ansiedad, así como también mejorar el estado de ánimo de las personas.

Por lo tanto, si tienes problemas de ansiedad o estrés, quizás sea una buena idea comenzar a leer un libro, o escuchar un audiolibro si no dispones del tiempo necesario.

Los audiolibros son buenos para todos

Queda demostrado que independientemente de tu edad, o el tiempo que dispongas, los audiolibros pueden ser de mucha utilidad.

No sólo encuentras audiolibros sobre novelas o historias ficticias. Puedes disponer de muchos textos distintos, desde entrevistas, historias reales e incluso libros de autoayuda y similares.

Hay un gran abanico de opciones disponibles que se adapta a todas las personas que quieren disfrutar de su contenido, pero prefieren otro método o están obligados a optar por el audio al no poder leer.